3 de diciembre de 2010

Todo cambia, sin excepción. Segundo a segundo el presente se desvanece  tan rápido que estamos en el futuro. Cada segundo es distinto, nunca va a ser la misma hora en toda tu vida. Es por eso que disfruto cada momento de mi vida y pongo atención a cada detalle, porque si cierro los ojos podría perderme algún cambio importante en la vida.