1 de enero de 2011

   Cuando una idea, ilusión, pensamiento, como quieras llamarlo se me pega es demasiado difícil deshacerme de el.  Cuanto más lo espero menos pasa, cuanto más lucho, más me hundo. Se me hace muy difícil dejar de pensar en que una pequeña ilusión no pase, porque en realidad nunca existió y fue producto de mi imaginación, que alimentada por tus palabras, aumentó.
    Me veo superada por mis falsas expectativas, por mis competencias. Sueño en lograr algo grande, pero si todos lo conseguimos todos seriamos grandes y pequeños al mismo tiempo, seriamos iguales, es por eso que la grandeza lo consiguen muy pocos, y estoy segura que el rostro y el dinero son requisitos indispensables, cosas que carezco. 
     No estoy segura de quien soy o en donde estoy parada, pero supongo que es natural y cuando crezca me voy a dar cuenta y ahí formaré mi futuro presente, con ilusiones, realidades, mentiras y problemas concretos, pero por ahora voy a disfrutar lo que tengo.