10 de diciembre de 2010


Tenía una obseción, algo con lo que perder el tiempo. se mintió a si misma sobre lo que amaba, tanto fingió que se la creyó, ahora persigue sus sueños, sus obseciones, a tal punto que ciega quedó. Cegó su mente, cegó su alma, cegó su corazón y lo único que quiere es esa estúpida ilusión.